Las calaveritas de azúcar y su historia
Significado de la calaverita
En la época prehispánica, cráneos de verdad eran colocados en una especie de pared llamada tzompantli. Esta estructura representaba el fin de una era o etapa. Con la llegada de los españoles, estas prácticas se fueron modificando, y se buscó cambiar los cráneos reales por una forma igual de otro material para que no se perdiera el sentido de la representación. Es justamente lo que las calaveritas de azúcar o alfeñique representan ahora en nuestros altares.
Antecedentes de la calaverita como golosina
Los dulces que se consumían en México antes de la llegada de los españoles eran básicamente la penca de maguey cocida (cuyos pedazos se masticaban hasta sacarle el jugo), también se hacían mezclas de miel de abeja y amaranto (que desde el año 2016 está en la lista de Patrimonios Inmateriales de la Ciudad de México) o pepitas de calabaza. Los dulces se ofrendaban a los dioses, pero también se consumían de forma cotidiana. Estas formas de dulce artesanal son populares aún en la actualidad.
Cuenta la historia, que las primeras cañas en México fueron traídas por Hernán Cortés desde Cuba, y se cultivaron en lo que ahora es Veracruz, donde se fundó el primer ingenio azucarero, y posteriormente Coyoacán y Cuernavaca. El azúcar se comenzó a utilizar también para disminuir el sabor desagradable que tenían algunos medicamentos. Teniendo ingenios azucareros, comenzó la historia de la confitería como tal en México en el siglo XVl, aunque su consumo masivo se detonó en el siglo XlX. Sin contar los dulces industrializados, hay dulces típicos que son iguales en todos los estados de nuestro país, otros son originarios y únicos de algunas zonas, empleando el azúcar refinado, azúcar morena, miel o piloncillo.
¿Qué es el alfeñique?
El alfeñique es una mezcla de azúcar glas, clara de huevo, limón y colorantes vegetales; el significado de la palabra alfeñique es justamente pasta de azúcar. Esta receta también llegó de España, aunque su origen es árabe. Curiosamente es una receta muy instaurada en nuestro país, al grado de que existe la Feria del Alfeñique en Toluca, Estado de México, en la cual podemos encontrar principalmente calaveritas e infinidad de figuras hechas con alfeñique, dulces de pepita de calabaza, de dulce de leche y frutas cristalizadas. También dulces en forma de fruta para colocar en el altar de muerto, las cuales pueden lucir, sin que se descompongan con el paso de los días. Todo hecho de manera artesanal.
Calaveritas con tu nombre
En el altar de muertos, se suelen poner las calaveritas personalizadas con los nombres de nuestros difuntos, pero también es común que se las regalemos a nuestras amistades con su nombre. Lejos de ser una broma de mal gusto son un recordatorio de que a diario estamos expuestos a la muerte, que debemos disfrutar cada momento y, que cuando nos llegue el día de partir, habrá personas que nos recuerden con cariño, y sigamos vivos a través de sus relatos y pensamientos.
En Flor de Piña tenemos velas con forma de calaverita de azúcar, de cempasúchil y papel picado, que lucirán muy bellas en tu altar y le darán a tus seres queridos la luz que necesitan para alumbrar su camino a visitarte y disfrutar de las cosas tan ricas y lindas con las que los esperas.